El Consejo Europeo firma una declaración para el impulso del empleo juvenil y las PYMES

El pasado 30 de enero, el Consejo Europeo firmó una Declaración conjunta en la que bajo el título Hacia una consolidación que propicie el crecimiento y un crecimiento que propicie el empleo, sienta las líneas prioritarias de actuación de los países miembros de la UE con vistas al próximo encuentro, en junio de 2012.

Las claves de la Declaración son el empleo juvenil y el apoyo a las PYMES, por ser ambos colectivos los más azotados por la crisis económica y financiera. Respecto del primero, el Consejo hace una llamada a los Estados para que contemplen en sus planes nacionales de empleo medidas encaminadas a reducir los altos niveles de desempleo que se registran en los distintos territorios y que se centran principalmente en la canalización de ofertas de empleo de calidad a la finalización de los estudios, principalmente mediante los contratos de aprendizaje y formación. Entre las medidas aportadas por el UE destacan la reorientación de los fondos europeos hacia los países que presenten mayores niveles de desempleo juvenil, potenciando los programas EURES y Leonardo da Vinci, de movilidad transfronteriza, y la revisión de la normativa de reconocimiento de cualificaciones profesionales –incluyendo la tarjeta profesional europea y el pasaporte europeo de capacidades--. En cifras, la UE aportará 22.000 millones de euros del Fondo Social Europeo 2007-2013, de los cuales un 12,27% corresponde a España que además lo completará con una aportación nacional de 4.000 millones de euros.

Respecto de las PYMES, la Declaración centra las medidas en la adopción de acuerdos sobre normalización y simplificación de los requerimientos contables exigidos a las empresas así como de la normativa de contratación pública; la puesta en marcha del plan de acción de comercio electrónico, la inyección de liquidez o la reordenación de los fondos estructurales para adecuar su asignación a las necesidades detectadas. Esto supondrá la aportación de ayudas procedentes del Banco Europeo de Inversiones y de los Fondos Estructurales.

Todas estas medidas se enmarcan dentro del cumplimiento de la Estrategia Europa 2020 y el Pacto por el Euro Plus y la necesidad de “modernizar nuestras economías y reforzar nuestra competitividad para garantizar un crecimiento sostenible”, como elementos anexos a la política de austeridad fiscal y de estabilidad financiera.